Cómo hacer crecer las pestañas

Ya no hay que recurrir únicamente a las pestañas artificiales para conseguir unas pestañas densas, largas y oscuras. La aplicación médica de los análogos de las prostaglandinas, utilizado para tratar el glaucoma y la tensión intraocular ha demostrado efectos muy positivos sobre su crecimiento. 

Las  pestañas cumplen una función tanto protectora del ojo como estética. Unos ojos llamativos con largas pestañas son un signo de belleza y se asocian a un mayor atractivo, confianza y autoestima, principalmente en la mujer. Las opciones más utilizadas para conseguir unas pestañas  largas, densas y oscuras son sobre todo cosméticas, como las máscaras de pestañas y las pestañas artificiales.

 

Existen pocos estudios acerca de agentes farmacológicos que aumenten el crecimiento de las pestañas. El bimatoprost es un análogo sintético de las prostaglandinas que es ampliamente utilizado para el tratamiento del glaucoma y la hipertensión intraocular desde su aprobación en el año 2001. A raíz de su utilización, se observó en los sujetos que lo usaban la aparición frecuente de un importante crecimiento de las pestañas como efecto secundario, y que aumentaba con el tiempo de aplicación. En diciembre de 2008, la FDA (Food and Drug Administration) americana aprobó una solución de bimatoprost de idénticas características a la usada para el glaucoma, para el tratamiento de las hipotricosis de las pestañas. 

 

Los dermatólogos estamos muy familiarizados con el uso de los análogos de prostaglandinas (bimatoprost – Lumigan®-, latanoprost –Xalatan®-) en el tratamiento de la alopecia areata de pestañas, con muy buenos resultados. Ahora se abre una nueva vía de utilización con fines puramente estéticos, en ausencia de patología.

 

La aplicación de Lumigan 0,03% colirio en la base de las pestañas, una vez al día durante al menos dos meses, aumentó de forma importante tanto la longitud como el grosor de las pestañas, y oscureció su color. Los efectos secundarios que se pueden observar con su uso son picor, eritema e irritación de la conjuntiva ocular, oscurecimiento de la piel en la zona de aplicación y oscurecimiento del iris en ojos claros, que puede ser permanente. Los resultados obtenidos son transitorios, con una duración que depende del ciclo de vida de la pestaña y que varía entre 5 y 11 meses.

 

Por último, merece la pena destacar que estos resultados no han pasado desapercibidos en el mercado cosmético actual, y que existen productos puramente cosméticos que contienen análogos de las prostaglandinas y que han sido preparados específicamente para ser aplicados con este fin.

 

Dra. Lola Conejo-Mir, dermatóloga de Sevilla y miembro de la AEDV.